domingo, 5 de diciembre de 2010

CONSECUENCIA DE LA CONTAMINACIÓN

Los efectos de la contaminación del agua incluyen los que afectan a la salud humana. La presencia de nitratos (sales del ácido nítrico) en el agua potable puede producir una enfermedad infantil que en ocasiones es mortal. El presente en los fertilizantes derivados del cieno o lodo puede ser absorbido por las cosechas, de ser ingerida en cantidad suficiente, el metal puede producir un trastorno diarreico agudo, así como lesiones en el hígado y los riñones.
Hace tiempo que se conoce o se sospecha de la peligrosidad de sustancias inorgánicas, como el mercurio, el arsénico y el plano.
Los lagos son especialmente vulnerables a la contaminación. Hay un problema, la eutrofización, que se produce cuando el agua se enriquece de modo artificial con nutrientes, lo que produce un crecimiento anormal de las plantas. Los fertilizantes químicos arrastrados por el agua de los campos de cultivo pueden ser los responsables. El proceso de eutrofización puede ocasionar problemas estéticos, como mal sabor y olor, y un acumulamiento de algas o verdín desagradable a la vista así como un crecimiento denso de las plantas con raíces, el agotamiento del oxígeno en las aguas más profundas y la acumulación de sedimentos en el fondo de los lagos, así como otros cambios químicos, tales como la precipitación del carbonato de calcio en las aguas duras, otro problema cada vez más preocupante es la lluvia ácida que ha dejado muchos lagos del Norte y del Este de Europa y del Noroeste de Norteamérica totalmente de provistos de vida

CAUSAS DE LA CONTAMINACIÓN DEL AGUA

La contaminación del agua causada por las actividades del hombre es un fenómeno ambiental de importancia, se inicia desde los primeros intentos de industrialización, para transformarse en un problema generalizado, a partir de la revolución industrial, iniciada a comienzos del siglo XIX.
Los procesos de producción industrial iniciados en esta época requieren la utilización de grandes volúmenes de agua para la transformación de materias primas, siendo los efluentes de dichos procesos productivos, vertidos en los cauces naturales de agua (ríos, lagos) con desechos contaminantes.
Desde entonces, esta situación se ha repetido en todos los países que han desarrollado la industrialización, y aún cuando la tecnología ha logrado reducir de alguna forma el volumen y tipo de contaminantes vertidos a los cauces naturales de agua, ello no ha ocurrido ni en la forma ni en la cantidad necesarias para que el problema de contaminación de las aguas esté resuelto.
Contaminación del agua

La contaminación del agua se produce a través de la introducción directa o indirecta en los cauces o acuíferos de sustancias sólidas, líquidas, gaseosas, así como de energía calórica, entre otras. Esta contaminación es causante de daños en los organismos vivos del medio acuático y representa, además, un peligro para la salud de las personas y de los animales.

Existen dos formas a través de las cuales se puede contaminar el agua. Una de ellas es por medio de contaminantes naturales, es decir, el ciclo natural del agua puede entrar en contacto con ciertos constituyentes contaminantes que se vierten en las aguas, atmósfera y corteza terrestre. Por ejemplo, sustancias minerales y orgánicas disueltas o en suspensión, tales como arsénico, cadmio, bacterias, arcillas, materias orgánicas, etc.

Otra forma es a través de los contaminantes generados por el hombre o de origen humano, y son producto de los desechos líquidos y sólidos que se vierten directa o indirectamente en el agua. Por ejemplo, las sustancias de sumideros sanitarios, sustancias provenientes de desechos industriales y las sustancias empleadas en el combate de plagas agrícolas y/o vectores de enfermedades.

EFECTOS DE LA CONTAMINACIÓN EN RIOS Y LAGOS

Contaminación del agua
Debido a su escasa entrada y salida de agua, los lagos sufren graves problemas de contaminación.
Los ríos, por su capacidad de arrastre y el movimiento de las aguas, son capaces de soportar mayor cantidad de contaminantes. Sin embargo, la presencia de tantos residuos domésticos, fertilizantes, pesticidas y desechos industriales altera la flora y fauna acuáticas. En las aguas no contaminadas existe cierto equilibrio entre los animales y los vegetales, que se rompe por la presencia de materiales extraños. Así, algunas especies desaparecen mientras que otras se reproducen en exceso. Además, las aguas adquieren una apariencia y olor desagradables. Los ríos constituyen la principal fuente de abastecimiento de agua potable de las poblaciones humanas. Su contaminación limita la disponibilidad de este recurso imprescindible para la vida.

Ciclo Hidrologico

SUSTANCIAS CONTAMINANTES DEL AGUA

Hay un gran numero de contaminantes del agua que se pueden clasificar de muy diferentes maneras. Una posibilidad bastante usada es agruparlos en los siguientes ocho grupos:


  • Microorganismos Patógenos.



  • Son los diferentes tipos de bacterias, virus, protozoos y otros organismos que transmiten enfermedades como el cólera, tifus, gastroenteritis diversas, hepatitis, etc. En los países en vías de desarrollo las enfermedades producidas por estos patógenos son uno de los motivos más importantes de muerte prematura, sobre todo de niños.
    Normalmente estos microbios llegan al agua en las heces y otros restos orgánicos que producen las personas infectadas. Por esto, un buen índice para medir la salubridad de las aguas, en lo que se refiere a estos microorganismos, es el número de bacterias coliformes presentes en el agua. La OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda que en el agua para beber haya 0 colonias de coliformes por 100 ml de agua.


  • Desechos Orgánicos.



  • Son el conjunto de residuos orgánicos producidos por los seres humanos, ganado, etc. Incluyen heces y otros materiales que pueden ser descompuestos por bacterias aeróbicas, es decir en procesos con consumo de oxígeno. Cuando este tipo de desechos se encuentran en exceso, la proliferación de bacterias agota el oxígeno, y ya no pueden vivir en estas aguas peces y otros seres vivos que necesitan oxígeno. Buenos índices para medir la contaminación por desechos orgánicos son la cantidad de oxigeno disuelto, OD, en agua, o la DBO (Demanda Biológica de oxigeno).


  • Sustancias Químicas Inorgánicas.



  • En este grupo están incluidos ácidos, sales y metales tóxicos como el mercurio y el plomo. Si están en cantidades altas pueden causar graves daños a los seres vivos, disminuir los rendimientos agrícolas y corroer los equipos que se usan para trabajar con el agua.


  • Nutrientes Vegetales Inorgánicos.



  • Nitratos y fosfatos son sustancias solubles en agua que las plantas necesitan para su desarrollo, pero si se encuentran en cantidad excesiva inducen el crecimiento desmesurado de algas y otros organismos provocando la eutrofización de las aguas. Cuando estas algas y otros vegetales mueren, al ser descompuestos por los microorganismos, se agota el oxígeno y se hace imposible la vida de otros seres vivos. El resultado es un agua maloliente e inutilizable.

  • Compuestos Orgánicos.



  • Muchas moléculas orgánicas como petróleo, gasolina, plásticos, plaguicidas, disolventes, detergentes, etc..., acaban en el agua y permanecen, en algunos casos, largos períodos de tiempo, porque, al ser productos fabricados por el hombre, tienen estructuras moleculares complejas difíciles de degradar por los microorganismos.


  • Sedimentos Y Materiales Suspendidos.



  • Muchas partículas arrancadas del suelo y arrastradas a las aguas, junto con otros materiales que hay en suspensión en las aguas, son, en términos de masa total, la mayor fuente de contaminación del agua. La turbidez que provocan en el agua dificulta la vida de algunos organismos, y los sedimentos que se van acumulando destruyen sitios de alimentación o desove de los peces, rellenan lagos o pantanos y obstruyen canales, rías y puertos.

  • Sustancias Radiactivas.



  • Isótopos radiactivos solubles pueden estar presentes en el agua y, a veces, se pueden ir acumulando a los largo de las cadenas tróficas, alcanzando concentraciones considerablemente más altas en algunos tejidos vivos que las que tenían en el agua.



  • Contaminación Térmica.



  • El agua caliente liberada por centrales de energía o procesos industriales eleva, en ocasiones, la temperatura de ríos o embalses con lo que disminuye su capacidad de contener oxígeno y afecta a la vida de los organismos

    EL AGUA

    El agua constituye un elemento natural indispensable para el desarrollo de la vida y de las actividades humanas; resulta difícil imaginar cualquier tipo de actividad en la que no se utilice, de una u otra forma.
    En nuestro planeta cubre el 75% de su superficie, pero no toda el agua se encuentra en condiciones aptas para el uso humano. El 97.5% del agua es salada, el 2.5% resultante es agua dulce distribuida en lagos, ríos, arroyos y embalses; esta mínima proporción es la que podemos utilizar con mas facilidad.
    El agua para satisfacer distintas necesidades se transforma en un recurso. Sin embargo no todas las personas disponen de él. Esto sucede por varios motivos, entre los cuales se puede mencionar la desigual distribución natural del agua en la superficie terrestre. Esta imposibilidad lleva a situaciones de escasez, que no tiene causas exclusivamente naturales, sino que también sociales. Esto nos permite decir que existe una estrecha relación entre la posibilidad de abastecimiento y el desarrollo, porque cuanto mayor es el desarrollo, mayor es la capacidad para obtenerla y mayor es la contaminación.
    La humanidad requiere el agua cada vez en mayores cantidades para realizar sus actividades. El mayor consumo de agua también se debe al incremento de las practicas de irrigación agrícolas, al gran desarrollo industrial o a la existencia de hábitos de consumo que, en ocasiones, implican su derroche.

    MULTIPLES USOS DEL AGUA

    El consumo de agua varia según el tipo de actividad para el cual se emplea. La agricultura de irrigación es la que demanda mayor cantidad; a ella le sigue la industria y en el ultimo termino el consumo domestico.
    En el caso de la agricultura, debemos considerar que mediante la irrigación artificial se logra incrementar la producción de alimentos. En el proceso industrial, el agua también es imprescindible: algunas industrias usan agua potable para elaborar sus productos, mientras que la mayoría la utilizan en sus procesos productivos, como refrigerante o como diluyente de efluentes.
    En el caso del consumo doméstico se tiene en cuenta el uso en la higiene personal, el lavado de utensilios, cocina, bebida, lavado de autos, riego de jardines, etc.
    Contaminación del agua
    En la actualidad, por ejemplo, la agricultura representa mas del 90% del consumo global de agua dulce continental; el resto se distribuye entre la industria y el uso domestico. El problema de la distribución del agua con respecto a las sociedades que la consumen ha generado respuestas tecnológicas variadas. Los antiguos romanos construyeron acueductos y norias.

    LA CONTAMINACIÓN DE AGUAS

    El problema de la contaminación de las aguas dulces es conocido de antiguo. Uno de los primeros testimonios históricos lo constituye el relato de las Sagradas Escrituras (Éxodo, 7, 14-25) acerca de una de las diez plagas de Egipto, en la que se describe la transformación en "sangre" de las aguas del río Nilo. Dicho fenómeno fue sin duda debido a la contaminación biológica producida por microorganismos (algas, bacterias sulfurosas o dinofíceos). Con el incremento de la población y el surgimiento de la actividad industrial la polución de ríos, lagos y aguas subterráneas aumenta constantemente. La Organización Mundial de la Salud define a la polución de las aguas dulces de la siguiente manera: "Debe considerarse que un agua está polucionada, cuando su composición o su estado están alterados de tal modo que ya no reúnen las condiciones a una u otra o al conjunto de utilizaciones a las que se hubiera destinado en su estado natural".
    La OMS ha establecido, también, los límites máximos para la presencia de sustancias nocivas en el agua de consumo humano:
    Sustancias
    Concent. Máxima (mg/l)
    Sales totales
    2000
    Cloruros
    600
    Sulfatos
    300
    Nitratos
    45
    Nitritos
    No debe haber
    Amoníaco
    0,5
    Mat. Org.
    3
    Calcio
    80
    Magnesio
    50
    Arsénico
    0,05
    Cadmio
    0,01
    Cianuros
    0,05
    Plomo
    0,1
    Mercurio
    0,001
    Selenio
    0,01
    Hidrocarburos aromáticos policíclicos
    0,0002
    Biocidas
    No hay datos
    De acuerdo a la definición que da la OMS para la contaminación debe considerarse también, tanto las modificaciones de las propiedades físicas, químicas y biológicas del agua, que pueden hacer perder a ésta su potabilidad para el consumo diario o su utilización para actividades domésticas, industriales, agrícolas, etc., como asimismo los cambios de temperatura provocados por emisiones de agua caliente (polución térmica).
    En realidad, siempre hay una contaminación natural originada por restos animales y vegetales y por minerales y sustancias gaseosas que se disuelven cuando los cuerpos de agua atraviesan diferentes terrenos.
    Los materiales orgánicos, mediante procesos biológicos naturales de biodegradación en los que intervienen descomponedores acuáticos (bacterias y hongos), son degradados a sustancias más sencillas. En estos procesos es fundamental la cantidad de oxígeno disuelto en el agua porque los descomponedores lo necesitan para vivir y para producir la biodegradación.

    Enfermedades transmitidas por la contaminación del agua y los alimentos

    En las comunidades rurales y urbano-marginales de Latinoamérica, más de la mitad de las enfermedades y de las muertes que ocurren en la primera infancia tienen como causa principal los microorganismos transmitidos a través de la ingestión de agua o de alimentos contaminados. Estas enfermedades pueden clasificarse en dos tipos:
    • Infecciones alimentarias: aquellas causadas directamente por los microorganismos, como por ejemplo las amibiasis o la salmoneiosis.
    • Intoxicaciones alimentarias: las causadas por las toxinas producidas por los microorganismos, como por ejemplo el botulismo o la intoxicación producida por estafilococos.
    Las condiciones en las que se favorece la aparición de estas enfermedades muchas y variadas. Los microorganismos causantes de las enfermedades pueden entrar a nuestro cuerpo por varias vías, como la boca y los pies descalzos. Cuando salen lo hacen también por la boca y nariz, así como por las excretas, es decir, heces y orina. Si una persona está infectada, los microorganismos o sus huevos salen por las excretas, Estas infectan las aguas y suelos, pasan a otros organismos, denominados vectores de transmisión (moscas, mosquitos o cucarachas, entre otros), desde los cuales vuelven al hombre.
    No practicar hábitos higiénicos, tanto a nivel personal como en la manipulación del agua y los alimentos, es la principal causa de la aparición de estas enfermedades.
    Medidas para prevenir enfermedades transmitidas por el agua o alimentos contaminados.
    La higiene personal
    La principal norma a aplicar en este caso es mantener unos hábitos de higiene personal, entre ellos el lavarse las manos con agua y jabón en los siguientes casos:
    • Después de ir al baño.
    • Antes y después de limpiar a enfermos y/o niños.
    • Antes y después de dar de comer a un niño.
    • Antes de preparar la comida y de comer.
    • Estado de conservación de los alimentos
    Es importante saber reconocer cuando los alimentos están en buen estado, por que de esos depende nuestra salud. Los alimentos naturales no se deben comprar estén demasiados maduros, marchitos o con mal aspecto y/o tengan olores desagradables. En cuanto a los alimentos industrializados, evitaremos comprarlos cuando tengan la fecha de vencimiento pasado, vengan en bolsas o cajas rotas y/o los envases estén abollados, abombados u oxidados.
    Una vez los alimentos se han preparado, no debe pasar mucho tiempo antes de que sean consumidos, y estos deben guardarse, en ese caso, bajo refrigeración. Aquellos alimentos que no requieren refrigeración deben mantenerse guardados en un lugar limpio y seco, resguardados de roedores e insectos.
    • Preparación y manipulación de los alimentos
    • Hervir el agua de consumo durante diez minutos.
    • Evitar criaderos de moscas y mosquitos en agua almacenadas.
    • Remojar en vinagre o limón por una hora las hortalizas que se van a consumir crudas.
    • Lavar bien las frutas, frotándolas.
    • Limpiar bien los utensilios de cocina con agua limpia, a ser posible hervida.
    • No consumir mariscos, moluscos o pescados crudos.
    • Cocinar bien los alimentos.
    • Mantener los alimentos fuera del alcance de los insectos, roedores y otros animales.
    • No ingerir comida en aquellos lugares que no garantizan unas buenas condiciones higiénicas.
    • Mantener la cocina bien limpia.
    • El agua contaminada
    El agua es sumamente importante para el organismo, es un elemento esencial para la subsistencia de los seres vivos. Pero no siempre el agua tiene las condiciones ideales para ser consumida. El agua potable debe tener las siguientes características: carecer de sustancias orgánicas en suspensión, ser clara, incolora, inodora e insípida y debe tener un residuo salino inferior al 5%.
    Aún así el agua puede contener microorganismos que producen enfermedades y que no se detectan a simple vista o por el olor o sabor. El agua, en este aspecto, se contamina fácilmente y por tanto es importantísimo tomar medidas de saneamiento, higiene y adecuada disposición de las excretas. El agua contaminada o que se presume contaminada, es sometida a una serie de análisis de control de calidad. En estos análisis se buscan aquellos microorganismos que se encuentran en las heces de los seres humanos o de los animales. La presencia de estos microorganismos indica la contaminación de esa agua. Por ello se les denomina microorganismos indicadores de contaminación fecal. Estos microorganismos pertenecen a un grupo denominado coliformes y se caracterizan por que tienen forma de bastoncillo.
    El cólera, el tifus y la hepatitis infecciosa son algunas de las principales enfermedades transmitidas por bacterias que viven en el agua. Otras enfermedades son transmitidas por otros organismos que se reproducen en el agua (por lo general aguas sin movimiento, como las de los pipotes o las aguas estancadas) y que transportan estas bacterias. Algunos ejemplos de estas enfermedades son el paludismo o malaria, la enfermedad del sueño y la fiebre amarilla.


    CONTAMINACION BACTERIANA EN AGUAS RECREACIONALES FACTORES INTERVINIENTES

    El uso de los recurso hídricos para fines recreativos, plantea problemas si se tiene en cuenta que
    es precisamente en los asentamientos de máxima concentración poblacional e industrial donde
    surgen los mayores requerimientos de medios de esparcimiento por parte de una población
    siempre creciente.
    Los balnearios son cuerpos de agua en creciente demanda y tienen una reconocida importancia
    social y económica. Una de las necesidades básicas, es el derecho a la recreación y los
    balnearios públicos son una alternativa para la población, especialmente aquella de menores
    recursos económicos.
    Cabelli, define a los criterios de calidad de agua de uso recreacional como una "relación
    cuantificable entre la densidad de un indicador en el agua y el potencial riesgo para la salud
    humana que supone el uso de aguas recreacionales".
    Todo intento de evaluar la calidad de un cuerpo de agua determinado se vuelve imposible si
    previamente no han sido fijados el o los usos a los cuales está destinado dicho cuerpo de agua.
    La experiencia general a nivel internacional ha demostrado que para lograr mantener el nivel de
    calidad adecuada a los fines de recreación, los resultados obtenidos mediante un riguroso control
    de las descargas ha sido mas efectivo que los obtenidos de las especulaciones sobre el poder
    autodepurador de los cursos receptores.
    Los datos con que se cuenta en la actualidad, indican que en los países templados el peligro de
    que los bañistas contraigan una enfermedad transmitida por el agua es mucho menor de lo que
    hubiese podido temerse, pero en zonas tropicales, donde estas enfermedades son ya endémicas y
    la proporción de portadores es muy elevada, constituye aún un enigma que exige la realización de
    nuevas investigaciones.
    La mayoría de los investigadores han acordado que la calidad bacteriológica del agua para
    bañarse no necesita ser tan alta como para beberla, pero que la primera debería ser mantenida
    razonablemente libre de bacterias de conocido origen patógeno en aguas residuales.
    Sin embargo, habría algunas razones para determinar ciertos criterios bacteriológicos en aguas
    para bañarse, basados en la probabilidad de infección. Ciertamente esta probabilidad existe,
    especialmente en piscinas para nadar y agua dulce natural donde algo de agua podría ser
    ingerida.
    Las denominadas "normas internacionales" para aguas recreacionales (en el sentido de que sean
    aplicables a todos los balnearios del mundo) no son tales, ni siquiera son seguidas por aquellos
    países que tienen un nivel de desarrollo similar. Las mismas fueron establecidas para cuerpos de
    agua sujetos a descargas puntuales de efluentes cloacales; no son válidas, por ejemplo para
    aquellos ambientes sujetos a fuentes dispersas. Estas fuentes también pueden representar un
    riesgo para la salud, pero no hay todavía investigaciones específicas (con respecto a la
    aplicabilidad de esos estándares), quizás debido a la dificultad del control y seguimiento de este
    tipo de aporte.
    En nuestro país tampoco hemos desarrollado un criterio propio (nacional o regional), habiéndose
    adoptado el de otros países. A pesar de que, en las mismas directivas de la Comunidad
    Económica Europea se aclara que no deben aplicarse en otros países sin haber realizado estudios
    específicos.
    Las enfermedades infecciosas causadas por bacterias, virus o protozoarios patógenos, son el
    riesgo para la salud más común y difundido que lleva consigo la ingestión del agua contaminada.
    Si bien los brotes de origen hídrico más numerosos y graves que han sido notificados se deben al
    consumo de agua de bebida, se han registrado además varios casos donde las aguas
    recreacionales protagonizaron un papel importante en la transmisión de dichos agentes
    patógenos.
    Son numerosos los gérmenes patógenos que pueden transmitirse al hombre a través de la
    utilización con fines recreativos de aguas dulces y saladas susceptibles de contaminación por
    aguas residuales.
    Durante la natación y otras actividades recreativas en las cuales hay una ingestión involuntaria de
    agua, se incrementa el riesgo de enfermedades gastrointestinales.
    En muchos casos se ha encontrado evidencia epidemiológica digna de confianza de que las
    infecciones microbiológicas han sido diseminadas por el contacto con el agua contaminada. En
    contraste con los años pasados, en la década presente alrededor de la mitad de los brotes de
    gastroenteritis fueron atribuídos a parásitos protozoos: Giardias y Cryptosporidium.
    Santa Fe y Santo Tomé tienen balnearios urbanos de importancia social, representan un escenario
    de óptimas ventajas para una de las necesidades sociales básicas como es el derecho a la
    recreación, detalle de tan ponderable gravitación como recurso terapéutico para el manejo de la
    salud en una sociedad enfrentada a soportar tensiones físicas e intelectuales que genera el diario
    vivir del tiempo presente. Los balnearios públicos urbanos son además la alternativa para la
    población de menores recursos económicos.
    Teniendo en cuenta los resultados de los muestreos obtenidos en la última década, la severa
    alteración provocada en la calidad del agua, la cantidad de bacterias detectadas (coliformes
    totales y termotolerantes) que exceden el límite recomendado por los expertos europeos junto con
    la O.M.S. para aguas recreativas, son hechos que atentan directamente contra la salud y la
    calidad de vida de los pobladores de la zona. Estos balnearios periódicamente resultan
    clausurados en función de los índices de calidad bacteriológica.

    lunes, 29 de noviembre de 2010

    Aguas contaminadas

    La contaminación del agua es conocida desde la antigüedad. En Roma eran frecuentes los envenenamientos provocados por el plomo de las tuberías que transportaban el agua. En las ciudades medievales eran, habitualmente, sucias y pestilentes y provocaban serios y extendidos problemas de salud que se fueron agravando cada vez más. En la actualidad, es alarmante la constante pérdida de agua potable.
    Los problemas del agua se centran tanto en la calidad como en la cantidad. La comunidad debe conocer la importancia de la "calidad" de la misma y esa misma comunidad de encargarse de su cuidado y preservación. Los primeros en contaminar las aguas son los pesticidas, llevados hasta los ríos por la lluvia y la erosión del suelo, cuyo polvo vuela hacia los ríos o el mar y los contamina. Además, los campos pierden fecundidad por abuso de las técnicas agrícolas. La sal acarreada en el invierno desde las rutas hasta los ríos es otro factor envenenante. Lo mismo que los diques y las represas, que "barren" amplias franjas de cultivo. La agricultura da cuenta de alrededor del 70% del uso global del agua.
    Ondas de agua
    Si bien las naciones industrializadas han tenido bastante éxito en el control de la contaminación proveniente de industrias, siguen teniendo problemas con la escorrentía en las tierras de cultivos y con las aguas que fluyen de los centros urbanos cargadas con todos tipos de elementos.
    La situación es muy distinta en los países en desarrollo, donde hay un déficit notable de sistemas cloacales y de controles de aguas residuales industriales.
    Es probable que diez países africanos experimenten una severa escasez de agua, con Egipto perdiendo vitales provisiones del río Nilo mientras otras naciones desarrollan las fuentes del río. En China, cincuenta ciudades enfrentan ya la escasez de agua. En India, decenas de miles de villorrios enfrentan la escasez. En México, se extrae un 40% más de agua de cuanto se reemplaza, lo que hace que la tierra se hunda e introduce la posibilidad de tener que importar agua dulce. En la ex Unión Soviética el agotamiento de agua de río para la irrigación y para otras necesidades ya ha hecho que el mar de Aral descienda dos tercios desde 1960 y en los Estados Unidos, un quinto de la tierra irrigada es sometida al excesivo bombeo de agua de pozo.
    Las propias viviendas están polucionadas por los productos de limpieza contra los cuales ya son poco efectivos los mantos filtrantes, taponados por esas "aguas negras" (Petróleo) que llegan al mar.
    A la basura producida por el hombre y los escapes de contaminantes industriales, hay que añadir los tóxicos fabriles echados a los ríos y la polución de los cientos de alcantarillas. Los países occidentales industriales han hecho algún progreso al establecer controles sobre la contaminación industrial en particular. Pero subsisten problemas masivos. A la mayoría, les resulta sorprendente que en los países con mayor capacidad económica, poco más de la mitad de la gente cuente con el servicio de plantas de tratamiento de aguas fecales. El río Rhin drena una de las regiones más altamente industrializadas del mundo. Ha sido el foco de importantes esfuerzos europeos por mejorar el alcantarillado y el tratamiento de los desechos industriales. Han vuelto los peces a algunas partes del río de las que estuvieron ausentes por décadas. Pero la contaminación por las sustancias químicas tóxicas y el desecho mineral sigue siendo alta. El peligro de polución esta siempre presente.
    El mar de Aral ha descendido dos tercios desde 1960.
    Las industrias pueden producir el ingreso de las aguas de sustancias altamente tóxicas: cobre, cinc, plomo, mercurio, entre otras. Estos metales suelen ser acumulativos, la ingesta repetida de pequeñas cantidades determina al cabo del tiempo altas concentraciones de metales en los tejidos de los organismos. Estas aguas contaminadas suelen terminar en el mar y gran cantidad de peces de consumo humano se convierten a su vez en agentes tóxicos.
    El mercurio es particularmente temido por su elevada toxicidad de alguno de sus derivados que, además, debido a su escasa biodegradabilidad se concentra en los seres vivos. El mercurio vertido en forma orgánica o mineral, se convierte en metilmercurio muy poco biodegradable, muy tóxico y se concentra muy rápido en las cadenas alimenticias. En algunos casos puede haber coeficientes superiores a los 100.000 en el agua contaminada y en algunos peces que viven en ella.
    Usar el agua de manera más eficiente reduciendo el derroche es obviamente el camino. Se ha estimado, que si el derroche de agua en torno del río Indo, en Pakistán, pudiera reducirse en sólo un décimo, podrían irrigarse otro dos millones de hectáreas de tierras cultivables. Por fortuna, se esta tomando conciencia en mejorar el flujo de los canales de irrigación y se esta usando la irrigación por tubo capilar para llevar el agua directamente a las raíces. Estos son algunos de los métodos para solucionar el problema de la escasez del agua y de la necesidad de aprovechar mejor los recursos de agua.
    Todo esto es un grave problema en algunos países del Tercer Mundo. La mayoría de los ríos de India son poco más que alcantarillas descubiertas que llevan al mar los desechos no tratados de las áreas rurales y urbanas. Alrededor del 70% de las aguas superficiales del subcontinente está contaminado. En general los ríos de Asia son tal vez los más degradados del mundo.

    Aguas que lloran por los humanos...

    El agua es fundamental para todas las formas de vida, lo que la convierte en uno de los recursos esenciales de la naturaleza... El volumen del agua en el mundo se expresa mediante una cifra de gran importancia: 1.360 millones de km3, es decir 1.360 trillones de litros. Si dividimos esta cifra por cada ser humano, le correspondería a cada uno 250.000 millones de litros, lo que equivaldría a 400.000 piletas de natación. Bajo estas perspectivas, el agua aparece como un recurso prácticamente ilimitado. Sin embargo, de esa enorme masa líquida, sólo el 3% es dulce y la mitad de ella es potable.
    Gota de agua
    Se entiende por agua potable la que es apta para beber y para los demás usos domésticos. Esta debe ser límpida e inodora, fresca y agradable. Debe contener algunos gases, especialmente aire y sales disueltas en pequeñas cantidades. No debe poseer materias orgánicas, gérmenes patógenos ni sustancias químicas.
    Esta agua es un bien indispensable para el desarrollo de toda civilización, ya que posibilita la expansión demográfica y los progresos de la producción, que van desde la agricultura hasta la electrónica.
    El agua es la necesidad más urgente para el ser humano. A pesar de ello, son muy pocas las poblaciones que disponen de este elemento en cantidad suficiente, ya que su distribución en el mundo es dispareja. Las aguas pluviales no se reparten equitativamente, sino que se concentran en zonas templadas y en los trópicos húmedos. Ayuda a que la vegetación prospere en algunos países y deja que sólo los desiertos prosperen en otros. Mientras existen regiones donde se precipitan hasta cinco metros de agua anuales, otras, reciben 1.000 veces menos. Proporciona abundante provisión de agua para beber a Islandia pero muy poca a Medio Oriente. En consecuencia, alrededor de 2.000 millones de personas en ocho países viven con escasez de agua. Están constantemente al borde de la sequía, pero aún aquellos países favorecidos con recursos hídricos enfrentan el problema de la escasez potencial.



    martes, 17 de agosto de 2010


    Las enfermedades transmitidas por el agua son producidas por el agua contaminada con desechos humanos, animales o químicos.
    Son enfermedades transmitidas por el agua el cólera, la fiebre tifoidea, la disentería, la poliomielitis, la meningitis y las hepatitis A y B. Los lugares que carecen de instalaciones de saneamiento apropiadas favorecen la rápida propagación de estas enfermedades debido a que las heces expuestas “a cielo abierto” contienen organismos infecciosos que contaminan el agua y los alimentos.


    La mayoría de estas enfermedades se pueden prevenir con la mejora del saneamiento público, la provisión de agua limpia y medidas de higiene como lavarse las manos después de ir al baño o antes de preparar la comida. La construcción de letrinas sanitarias y el tratamiento de las aguas servidas para permitir la biodegradación de los desechos humanos ayudarán a contener las enfermedades causadas por la contaminación.      http://www.panalimentos.org/comunidad/educacion1.asp?cd=323&id=102